Han participado en una mesa redonda organizada por la Amephu y la Comisión de Igualdad y Diversidad de Ceos-Cepyme Huesca
Tres matemáticas con diferentes perfiles han dado este viernes visibilidad al trabajo científico de las mujeres con el doble objetivo de romper el techo de cristal, esa barrera que frena la igualdad, y de demostrar que “no hay que ser una Marie Curie para dedicarse a esto”.
Las ponentes han participado en una mesa redonda organizada por la Asociación de Mujeres Empresarias de la Provincia de Huesca (Amephu) y la recientemente constituida Comisión de Igualdad y Diversidad de la Confederación Empresarial de la provincia de Huesca (Ceos-Cepyme Huesca), de la que forma parte DIARIO DEL ALTOARAGÓN.
El Parque Tecnológico tambnién ha colaborado en la iniciativa y ha acogido esta jornada llevada a cabo para conmemorar el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, en el marco del proyecto Ciencia y Tecnología en Femenino y la Iniciativa 11 de Febrero.
La mesa redonda ha estado moderada por Raquel Villacampa Gutiérrez, matemática , profesora del Centro Universitario de la Defensa-IUMA y representante de la Iniciativa 11 de febrero en Huesca.
También han participado Pilar Bolea Catalán, matemática, profesora jubilada del área de didáctica matemática de la Universidad de Zaragoza, y Cristina de la Hera Pascual, matemática, trabaja en la actualidad en el área de programas internacionales de I+D+i, de ITAINNOVA.
Raquel Villacampa ha detallado el objetivo del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia: “Es una jornada programada para mostrar a las niñas referentes de mujeres que se dedican a la ciencia y la tecnología porque aquello que no ves es como si no existe”.
Respecto a estos ejemplos a seguir ha comentado que “no tienen por qué ser super brillantes, no hay que ser una Marie Curie para dedicarse a esto, hablamos de nuestras vecinas, nuestras tías, mujeres del día a día”.
Se trata, ha apuntado, de ir avanzando en igualdad: “A ver si así las niñas, y los niños también por qué no, deciden tomar este modo de vida científico y dedicarse a ello”.
En esta línea, ha advertido que “una disciplina en la que falte la mitad de la población no está completa”. Algunos estudios reflejan que la presencia femenina en alcanza el 10 % en algunos ámbitos como por ejemplo la Ingeniería Informática.
Respecto a aeste dato ha manifestado que, “es muy bajo, algo que tiene consecuencias”. Por ejemplo, hay muchos algoritmos que tienen un sesgo de género masculino porque están programados por hombres, “y todo esto hay que tratar de romperlo desde la escuela”.
Fuente: Diario del AltoAragón